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jueves, 23 de noviembre de 2023

Pinguichís

Una de las ilustraciones de Lourdes Medina para el libro "Pinguichís" de Raquel Silvetti


En octubre de 2023 un grupo de escritores y artistas latinoamericanos, con el auspicio de la Universidad de la Defensa de Argentina, presentaron un proyecto de literatura intantil antártica.

Como parte de este proyecto, desde Uruguay se presentó el libro "Pinguichís" de Raquel Silvetti con ilustraciones de Lourdes Medina 

A continuación les invitamos a ver el video del momento de su presentación:


y aquí la vemos a Raquel con su Pinguichís, diseñado por Lourdes Medina...  

 y en este video, Raquel SIlvetti nos muestra una exhibición de materiales relacionados a la Antártida, existentes en la Biblioteca Nacional de Uruguay


Si desean ver la versión digital del libro, la pueden leer desde aquí

Pinguichís by Antawa on Scribd


Información publicada por el equipo de difusión de Marosa la Foca Curiosa y su amigo el Pingüino Borravino, con el apoyo de Gélida Polares


domingo, 13 de noviembre de 2022

La Luna y las mareas terrestres




La Luna y las mareas terrestres



Historias de Marosa, la foca curiosa

La Luna y las mareas terrestres
Por Waldemar Fontes

Terminaba el mes de marzo y el verano austral llegaba a su fin.  Las piedras de la playa, que hasta unos días atrás estaban sueltas y flojas, comenzaban a quedar soldadas unas con otras a causa del frío que se hacía más intenso.

No había viento y Marosa, descansaba en una hondonada disfrutando la calma, cuando sintió un ruido de pasos. Era Borravino que se acercaba.

-¡Hola Marosa! dijo el pingüino. -¿Has visto la luna llena que está saliendo en el horizonte?

Marosa, curiosa como siempre, levantó la cabeza y miró hacia el lugar que señalaba su amigo.

Una luna anaranjada, redonda y grande, salía con fuerza, como una flor que brotara del mar. La escena ofrecía un momento grandioso y único.

Los científicos de la base Artigas, maravillados también salieron afuera y contemplaron el momento.

El mar estaba quieto y no había olas, pero… a medida que la luna se elevaba sobre el horizonte, el agua quieta pareció cobrar vida y las olas comenzaron a golpear la costa, llegando hasta el lugar donde descansaba Marosa.

-Sube la marea, dijo el pingüino, -Tendrás que ir a descansar a un lugar más alto…

-Sí, la luna ha influido… ¿sabías que la atracción de la luna es la causa de las mareas?

- ¿Cómo es eso? Preguntó Borravino.  ¿Cómo puede influir la luna, si está allá, tan lejos?

-En realidad, no está tan lejos y menos aún cuando está como ahora, en lo que se llama Luna Llena.

Según me explicó un científico del Instituto Geográfico Militar, la luna influye no solo sobre el mar, sino también sobre la tierra.  Por esa razón, esta persona estaba estudiando lo que llamaba, las “mareas terrestres”

-No me entreveres, dijo Borravino. -Si son mareas, ¿cómo van a ser terrestres? ¿No tendrían que ser del mar?

-Yo creía eso también, explicó la foca, -pero buscando en Internet encontré que existen muchos tipos de mareas, por ejemplo, las mareas solares, lunares y por supuesto las mareas terrestres…

- ¿Mareas lunares también? Dijo el pingüino. - ¿No era que la luna las causaba?

-Sobre la tierra, influye la luna, pero también ocurre al revés…Además, hay que tener en cuenta la influencia del Sol y de los planetas.

- ¡Qué lio!, todo está relacionado y si se mueve algo por un lado, influye en otros lugares.

-Exactamente, así es.  Hasta los terremotos que se producen en nuestro planeta, están relacionados también.

-Según me explicó el científico, -siguió Marosa- Los movimientos de la tierra producidos por la atracción de la luna y el sol, pueden hacer subir y bajar la corteza terrestre ¡más de 25 centímetros!

-¡Pah! Dijo Borravino, - ¡Qué increíble!  Pero… sabes que estuve charlando con una ballena que viaja mucho y me contó que estaba nadando por el Océano Pacífico cuando sintió que todo se movía.  Se asustó mucho y luego se enteró que en Sudamérica había ocurrido un terremoto muy fuerte.  ¿Crees que pueda haber terremotos acá en la Antártida?

-Sí, contestó Marosa. –Sobre todo aquí en las islas Shetland del Sur, donde vivimos nosotros, que son islas de origen volcánico.  Hay varios sismógrafos instalados y a menudo se registran temblores y movimientos…

Marosa, seguía hablando pero el pingüino ya no la escuchaba.  Se iba caminando rumbo a una lomita que estaba cerca de allí.

-¿A dónde vas, Borravino?

-Cómo soy tan chiquito, me voy a parar a la luz de la Luna y aprovechar que la marea está subiendo, ¡a ver si crezco yo también!…


lunes, 26 de noviembre de 2018

¿Alienígenas en la Antártida?



Marosa la foca curiosa, andaba por la Base Científica Antártica Artigas cuando vio dos personas comentando que habían encontrado un mosquito. Eso era algo muy extraño en el inhóspito clima antártico, así que se apresuró a buscar a su amigo, el pingüino Borravino para contarle...


Historias de Marosa, la foca curiosa

¿Alienígenas en la Antártida?

Por Waldemar Fontes

La temporada de verano se acercaba y los días se hacían largos y la gente de las bases, aprovechaba para hacer mantenimiento de las instalaciones, reparando los daños que el duro invierno había ocasionado y preparando todo para recibir el relevo que pronto llegaría.

La foca Marosa estaba curioseando por un costado de la Base Científica Antártica Artigas cuando vio que dos personas que trabajan limpiando una cámara séptica, comentaban muy admirados, que habían encontrado un mosquito. 

Eso era algo muy extraño en el inhóspito clima antártico y hasta Marosa se sorprendió por lo que decían… Por esa razón se apresuró a buscar a su amigo, el pingüino Borravino para contarle. 

-¡Dicen las personas que encontraron un mosquito! ¿Cómo pudo hacer para sobrevivir en este clima tan frío? 

-¿Un mosquito? Preguntó el pingüino – ¿de dónde salió? 

-No me imagino, contestó la foca. Para mí que se equivocaron y lo que vieron fue una típula

-¿Típula? ¿Qué es una típula? Nunca conocí una, dijo Borravino. – ¿Vamos a ver? 

-Vamos, dijo la foca mientras le explicaba al pingüino, que su abuela le había contado que las pobres típulas siempre habían sido confundidas con los mosquitos… 

-¿Cómo es eso? Insistió Borravino. ¿Son mosquitos o no? 

-En realidad no lo son. Los mosquitos pican y se alimentan de sangre y las típulas se alimentan de jugos vegetales. Según me contó mi abuela, las típulas pueden vivir mucho, mucho tiempo sin alimentarse... 

Típulas, dibujo de Moses Harris

-Que animales interesantes, mira si los comparas con mi amiga la ballena Josefina que come toneladas de comida… 

Marosa se rió y dijo: -No se puede comparar… 

Pero, te sigo contando. Mi abuela decía que las típulas son más bien moscas, que mosquitos. 

-Pero igual, dijo el pingüino. ¿Cómo hace una mosca para vivir acá, con este frío? 

-No sería cualquier mosca. Hay una especie que vive en estas latitudes, en las islas sub antárticas, desde tiempos inmemoriales y aunque a las personas les parece extraña, se podría decir que es tan de aquí como las focas y los pingüinos. 

-Uy ¡qué tranquilidad me das! Yo estaba pensando que era uno de los personajes de la película “Alien versus Depredador” 

-¡No! Las típulas no, dijo la foca. -Las han estudiado desde principios del siglo XX y aunque los científicos piensan que llegaron hasta acá en algún barco, en realidad nunca se pudo comprobar y habría que aceptarla como un habitante más de la Antártida. 

-Mi abuela me contó que en inglés la llamaban “crane fly” que significa “la mosca zancuda” y que tienen un nombre científico: se llaman “Tipula antarctica Alexander, 1920”. 

-¿Quién era Alexander? ¿Acaso era su papá? Preguntó el pingüino 

-¡No!, contestó Marosa. Era un entomólogo, o sea un científico de los que estudian los insectos. Alexander nació en Nueva York en 1889 y murió en 1981. 

-Según me contó un investigador, Alexander describió en su vida 11.000 especies, o sea que hacía la descripción completa de un animalito, cada día de su carrera, por 30 años! 

-¡Qué cantidad! ¡Es impresionante! Dedicó su vida a investigar los insectos. Nunca pensé que hubiera tantas especies. 

-Así fue, y a pesar de todo, aún quedan especies por descubrir. 

-¿En serio? Está bien. Comprendo que esta esa mosca zancuda, no es un “alien”. Pero hay otros animalitos que si los son, insistió el pingüino. 

-Si, lamentablemente es así. Me contó mi amigo el investigador, que con el cambio climático y a causa del mayor movimiento de barcos y aviones, el mundo se ha globalizado y hay muchas especies que se han trasladado de un lugar a otro, invadiendo lugares que no eran los suyos. 

Me contó un gaviotín, que se han reunido científicos de Rusia, Polonia y Corea del Sur con los investigadores de Uruguay, para observar y controlar la presencia de una mosca no autóctona que anda volando por la isla Rey Jorge, a la que llaman Trichocera maculipennis


-Lo sabía! ¡esos son los “aliens”! Gritó el pingüino alarmado 

-Si, respondió la foca, -se les llama “aliens” en inglés, pero en español diríamos especies alienas o alóctonas, que significa: “Que tiene un origen diferente del lugar donde se encuentra”. 

-Solo de escuchar ese nombre, ya me da miedo, dijo el pingüino. –¿Crees que los alóctonos nos terminaran invadiendo? 

-Sería posible, dijo la foca. –Pero las personas que están trabajando e investigando en la Antártida, han tomado conciencia de este riesgo y están aplicando medidas preventivas, como ser fumigar las cargas antes de desembarcarlas, desinfectar las ropas y las botas de la gente que llega.

-Pero, los alienígenas pueden esconderse en cualquier lugar, o venir disfrazados de nieve, de ballena o ¡hasta de foca!

-¿De foca? En todo caso de pingüino. No me extrañaría que alguien como tú, viniera de otro planeta… Pero en todo caso, los alienígenas son otra cosa. 

-“Alienígena” es la palabra que se emplea para designar a los seres extraterrestres, de las historias de ciencia ficción… y nosotros hablábamos de especies ajenas a la Antártida que por alguna razón, han llegado hasta aquí y la estarían contaminando. 

Las personas de la Base Artigas, siguen un procedimiento llamado “Medidas preventivas para evitar la introducción de especies alienas en la Antártida” y así intentan proteger nuestro hábitat libre de invasores.

-Qué bueno saber eso, dijo Borravino. –entonces iré a avisarle a Don Camejo, el elefante marino gruñón que se instaló en mi playa. No puedo creer que sea autóctono de la Antártida, con ese mal humor que tiene. Pero por las dudas, antes que lo rocíen con algún producto para espantarlo, prefiero espantarlo yo. 

 Y se fue raudo rumbo a la playa, blandiendo sus alitas, para asustar al elefante marino, que lo miraba incrédulo… sabiéndose dueño del lugar, por más que aquel pingüino barullento, lo quisiera impresionar.

-oOo-

Para saber más

Referencias




SABIAS QUE…
Uruguay ha publicado un documento titulado “Medidas preventivas para evitar la introducción de especies alienas en la Antártida, en cumplimiento del Anexo II del Protocolo”, que detalla los procesos empleados para evitar que especies no originarias de la Antártida (alóctonas), ingresen accidentalmente al área del Tratado Antártico.



Historias de Marosa, la foca curiosa
¿Alienígenas en la Antártida?

sábado, 25 de abril de 2015

Porley, el pingüino rey

Historias de Marosa la foca curiosa
Por Waldemar Fontes

25 de abril: Día Mundial del Pingüino

Marosa estaba muerta de calor, bañándose en la playa de la Base Artigas cuando vio, muy orondo, a un viejo pingüino Real que venía hacia ella.

Había dos grados bajo cero y eso era bastante caluroso para fines de mayo, así que tanto la foca como el pingüino, traspiraban y se quejaban del tiempo.
Porley, el pingüino rey

-Qué cosa de locos, dijo Porley el pingüino rey. –Pensar que antes, en esta época el mar ya estaba congelado y uno podía zambullirse tranquilo por los agujeros del hielo, sabiendo que podría disfrutar una agradable temperatura debajo del agua… Pero ahora ¡esto es imposible!.

-Es cierto, dijo Marosa. –Mi abuela me contaba lo mismo, pero ahora, el cambio climático está afectando todo.

-Sí, fíjate. En la isla donde yo vivo, hace tanto calor que me tengo que venir por acá más al sur porque no se ya, donde meterme. Dijo Porley

-Le pasa como a los pingüinos Adelia, dijo Marosa. –Ellos antes estaban por acá mucho tiempo, pero ahora se fueron más al sur por lo mismo que usted dice.

Estaban muy entretenidos en la charla, cuando vieron unas personas que salían del comedor de la base, muy entusiasmadas.

-¡Miren! Es una foca, dijo una de las personas.

-Debe ser Marosa, dijo otra, mira que linda y peludita que es.

Marosa y Porley se miraron, -¿No es un lobo marino, lo que están fotografiando? Preguntó el pingüino.
un lobo marino

-Exactamente. Pero es que se trata de la gente nueva que recién llegó a la base. Explicó Marosa. -Aún no saben distinguir entre una foca y un lobo marino, o entre un pingüino emperador y un pingüino rey.

-Ya lo ves. Con esa misma ignorancia, las personas destruyen todo y por eso nosotros sufrimos las consecuencias y nos tenemos que mudar de lugar.

-No todas las personas son así. Dijo Marosa. –Mire, allí salió el jefe y les está explicando una vez más, que una foca y un lobo no son lo mismo.

-Los lobos tienen orejas y pelos y muchas otras diferencias... Explicó el Jefe, invitándolos a buscar fotos de ambos en internet para que los compararen y aprendan.

-¿Viste cómo les enseña? También les explica que no nos deben perturbar y aunque si pueden acercarse a tomarnos fotos, nunca deben molestarnos.

-También es cierto que hay algunas personas que son muy desconsideradas, Siguió diciendo Marosa, -pero de a poco eso está cambiando y algunos tratan de unirse para salvar el planeta.

Mientras charlaban, vieron que del taller salía una moto de nieve con dos mecánicos. Iban a recuperar un carrier al que se le había roto una oruga, en la noche anterior.

Como los días son muy cortos en esta época, habían dejado el vehículo en el lugar donde se había detenido, porque la oscuridad no les permitía ver nada. Entonces lo trajeron hasta el hangar y allí lo comenzaron a reparar.

Mientras el mecánico trabajaba, algunos de la base se acercaron a tomarle fotos a Porley, el pingüino rey.

los mecánicos reparaban el carrier, mientras Marosa y sus amigos los observan


Una paloma antártica se acercó, como para que la fotografiaran también y mientras posaba le preguntó a Marosa.: -¿Otra vez están cambiando una oruga del carrier? ¿Lo hacen para practicar, o lo hacen para proteger el medio ambiente?


Marosa, con complicidad le respondió: -Las dos cosas… dijo la foca. -Por el medioambiente podría ser, pero más bien creo que están necesitando orugas nuevas…

Los amigos de Marosa se rieron al ver el trabajo que pasaban los humanos y se alegraron porque se esforzaban en cuidar la naturaleza.

Mientras cada cual seguía con sus cosas, Porley, feliz de haber visitado la Base Artigas, antes de partir, muy coqueto se puso a cantar, como para que lo filmaran y luego lo publicaran en Youtube…







Marosa la foca curiosa,
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domingo, 22 de marzo de 2015

Haciendo agua

Historias de Marosa la foca curiosa
Por Waldemar Fontes



Marosa, la foca curiosa, iba subiendo por la colina que separa la base antártica Artigas del lago Uruguay cuando escuchó que un integrante de la dotación decía: -“Hoy vamos a hacer agua”

-¡Milagro! -pensó la foca- con la escasez de agua que hay en el mundo y ¡estos hombres saben cómo hacerla!

Justo pasaba por allí Pipín el Gaviotín y le pidió que le avisara a su amigo el Pingüino Borravino, así aprendían cuál era el secreto de “hacer agua”.


Uno de los hombres caminó hasta una caseta y cerró la puerta.  Escucharon que hablaba por radio mientras otro le contestaba: -Estamos listos para recibir, manda agua.

-Allí adentro debe ser como un templo donde fabrican el agua, dijo Marosa. –Por eso se encierran allí para que nadie vea cómo la hacen…

El pingüino la miró y le dijo: -Pero si el agua ya está hecha. ¿No ves que hay un lago y simplemente la extraen de ahí?.

Marosa quedó desilusionada. –Entonces, ¿ellos tampoco saben cómo hacerla?

-No. La naturaleza la produce y la pone en lugares como este lago y si no la cuidamos, se ensucia y no sirve para beberla.

-¿Por qué dicen entonces, que van a “hacer agua”? preguntó Marosa.

-Es que no siempre es fácil obtenerla. Por ejemplo, acá en la Antártida, en invierno, todo se congela y para obtener agua líquida, como la beben las personas, tienen que hacer unas maniobras muy complicadas.

-Pero el agua, aunque esté congelada, sigue siendo agua. Dijo la foca.

-Claro, el agua puede estar líquida como ahora a fines del verano en este lago; sólida cuando se congela o en vapor como en esas nubes que vemos.

-¡Qué complicado!. Y cuando está hecha nubes, ¿cómo queda allá arriba y no se cae? Preguntó la foca curiosa, midiendo si Borravino sabía.

-El vapor es más liviano que el aire y por eso flota allí arriba en forma de nubes. Cuando se hace líquida cae en forma de gotas, como lluvia o sino en forma de nieve, rocío y otras maneras, que todas se llaman “precipitaciones”.

-¿Cómo sabes tanto?

-Es que estuve conversando con la meteoróloga que se fue en el último vuelo y me lo explicó.

-Mira que bien, -dijo la foca- Entonces seguramente también sabes cómo “hacen agua” en invierno, cuando todo se congela.

-Claro, en este lago, la sacan de abajo del hielo. Aunque se congele la parte de arriba, abajo queda el agua líquida.

-Así es –dijo la foca- aunque es muy difícil llevarla hasta las casas, porque si la temperatura es muy baja se congelan las cañerías y se obstruyen...

-Con razón le dan tanta importancia, dijo Borravino.

-¿Sabías que el 22 de marzo es el Día Mundial del Agua?

-No lo sabía, Cuéntame.

-En este día las personas tratan de recordar a los que se olvidaron, que el agua dulce que todos necesitamos para vivir, es escasa y deben cuidarla. Tratando de tomar conciencia que el agua recorre muchos lugares y no sabe de fronteras, así que la tienen que cuidar entre todos sin contaminarla ni ensuciarla.

-Acá en la Antártida el agua es muy limpia, dijo Borravino.

-La Antártida es la reserva de agua dulce del mundo… y si se derrite, se perdería, yéndose al mar, afectando el medio ambiente marino, contestó la foca.

-¿Y por qué las personas no beben agua salada? Hay tantos mares llenos de agua salada…

-No pueden –dijo Marosa– Los pingüinos y otros animales marinos sí, pero los seres humanos no pueden hacerlo.

-Son muy complicados estos seres humanos –dijo Borravino- ¿por qué no picotean el hielo como hacemos los pingüinos?

-Será porque no tienen pico…

-¡Tienen si! –dijo el pingüino- si ayer los oí decir que iban a partir hielo, con pala y pico … - Los animalitos se rieron. -Qué cosas dices Borravino, vamos a la playa a bañarnos, y dejemos que las personas sigan aprendiendo lo valiosa que es el agua.

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Para saber más
Si los humanos beben sólo agua del mar, se deshidratan, al igual que ocurre con otros animales terrestres; sin embargo, los delfines, ballenas, gaviotas, focas, pingüinos y otros seres marinos si pueden hacerlo.
Los peces marinos tienen unas células especializadas en eliminar el exceso de sales del agua, son las células de cloruro, mientras que aves y reptiles marinos para esta función tienen las glándulas de la sal. Estas estructuras les permiten beber agua salada y eliminar el exceso de cloro, sodio y potasio;
Las focas no beben agua salada. Cuando se alimentan bajo el agua, los músculos en su garganta impiden que entre el agua de mar. Las focas obtienen normalmente el agua que necesitan de la comida que atrapan. Cuando está disponible, beben agua fresca ocasionalmente y se ve con frecuencia que las crías “comen” nieve.  


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En este video, se aprecia como corría el agua del deshielo del Glaciar Collins, en marzo de 2009, cuando nos preparábamos para recordar el Día Mundial del Agua de ese año:



Sobre el Día Mundial del Agua
El Día Mundial del Agua, se celebra el 22 de marzo de cada año y está coordinado por UN-Water, un mecanismo de colaboración de la ONU para temas relacionados con el agua potable en el que participan gobiernos y otras entidades.



Saludos de Marosa, la foca curiosa
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martes, 18 de junio de 2013

Títeres... Tres pingüinos y un elefante marino, nos cuentan cosas de la Antártida

Marosa, la foca curiosa, recibió un mensaje de sus amigos de la Antártida y lo quiere compartir con ustedes.

Tres pingüinos y un elefante marino

Los pingüinos, Calixto, el pingüino listo y Calordo, el pingüino gordo, acompañados de Morena, la pingüina soltera y Don Camejo, el elefante marino viejo, están visitando colegios y escuelas, contando a los niños, cómo es la vida en la Antártida.
En esa tarea de difusión, ya estuvieron en la Muestra Internacional de Teatro Perimetral 2013, donde una sala llena de chicos disfrutando fascinados, fueron testigos de la presentación de la obra "Tres pingüinos y un elefante marino",  que se representó en el Club Policial de Solymar (Canelones) el 12 de setiembre de 2013.
¿Quieren ver algunas escenas?
Miren...



La historia comienza con un científico que cuenta cómo es su trabajo de investigación en la Antártida, hasta que se encuentra con Calixto, el pingüino listo, de quien se hace amigo enseguida.


El científico no puede creer que exista un pingüino que hable, pero se tiene que convencer y entonces le pide que le cuente una historia para estudiarla y hacerse así un científico famoso...


La obra a representar, es "Tres pingüinos y un elefante marino" de Waldemar Fontes y las titiriteras son Liliana González y Anna Lazo, integrantes del grupo de títeres "Mujeres con Alas y otras".


Hay música y canciones en vivo, interpretadas por Carlos Krause.

Las titiriteras con su teatrillo a cuestas

Mujeres con alas y otras - Titeres
http://mujeresconalastitiriteras.blogspot.com
Titiriteras: Liliana González y Anna Lazo
Música: Carlos Krause

Contactos a los teléfonos:
Anni: (598) 2696 2702
Lili: (598) 2698 8429

Queremos, a través de nuestras herramientas "los títeres", transformar el mundo,alegrar los corazones de niño-as y adulto-as. También queremos divertirnos, compartir la risa, ayudar a soñar y reivindicar este viejo arte, que por alguna fea razón... está guardado en un viejo baúl




¿Quieres verlos ensayando?





El grupo de Títeres "Mujeres con Alas y otras" ensayando la obra de Waldemar Fontes, "Tres pingüinos y un elefante marino", fue seleccionada para la Muestra Internacional de Teatro Perimetral 2013, (Uruguay).
Ensayo realizado en El Pinar, Uruguay, el 20 de agosto 2013
Actúan: 
Liliana González y Ana Lazo, como titireteras y escenografía
Carlos Krause, Música y canciones



¿Quieres colaborar?





Mujeres con Alas, Títeres



Para quienes quieran conseguir el libro, lo pueden pedir o encargar en cualquier librería de Uruguay,  lo distribuye GUSSI y es de Editorial RUMBO.

Lo puedes obtener en versión E-BOOK Kindle  

También lo puedes encontrar en la Librería Yenny en Bvrd España esquina Rambla del Perú, (Montevideo) teléfonos (598) 2711 6337   mail: lh@yenny.com.uy





Contactos:teléfono 26962702-   Anni. Teléfono 26988429-Lili
 ¿Cómo conseguir el libro Tres pingüinos y un elefante marino?

lunes, 30 de abril de 2012

Acompañado: otra película rodada en la Antártida


Historias de Marosa la foca curiosa
por Waldemar Fontes
con fotos de Gabriela Rufener
Historia original publicada en Copos de Nieve 37 - abril 2012



Se terminaba abril y este año el invierno venía temprano.  Mucho hielo en la costa, ventiscas y mal tiempo habían sido la norma de estos días en la Isla Rey Jorge.
Un grupo de tres pingüinos de pico rojo estaban listos para partir al norte, pero a causa del mal tiempo, decidieron quedarse unos días más.  
Para no aburrirse se fueron hasta la Base Artigas donde había aún muchas personas, algo inusual para esta época pues ya todas las bases habían comenzado la invernada.
Entre los hielos de la costa, los pingüinos se encontraron con Marosa y ésta enseguida les dijo que se quedaran quietos y miraran, porque las personas estaban rodando una película.
-¡Una película! No lo puedo creer, dijo el pingüino más gordo.
-¿Cuándo la exhibirán en los cines? preguntó otro.
-¡Yo quiero salir en la película y convertirme en un actor famoso! Dijo el tercero.
-Calma. Dijo Marosa, -El protagonista de la película es un músico que está triste y dice estar solo…  no creo que le interese estar con unos pingüinos charlatanes como ustedes.
-Qué aburrido, dijo el pingüino gordo.  -Yo pensé que era una película de acción o de aventuras…
-O de terror como aquella de “Alien versus Depredador”, dijo el otro.
-No, esta es una comedia dramática y por la cara del actor principal, parece que es muy seria.
-A mi me hubiera gustado actuar en la “Marcha del Emperador”… dijo el pingüino más pequeño, -pero nunca me elegirían como actor, porque en el casting solo aceptaban a esos  gigantes engreídos…
-Yo hubiera preferido actuar en “Rescate en la Antártida”, dijo el más gordo, -pero no me aceptaron porque no era perro.
-Tú tendrías que haber trabajado en “La Cosa”, -allí como monstruo, hubieras hecho un buen papel…
-Qué malos que son, dijo Marosa.  -¡Pero miren! Están trayendo las cámaras para este lado.
Un grupo de personas se reunió en la parte alta de la costa y observaban como trabajaba el grupo de camarógrafos.
El Director dio una orden y desde la base, vieron venir al protagonista, que caminaba solo, apesadumbrado y con una trompeta en la mano.
Los pingüinos se acercaron a Marosa y quedaron en silencio.
El actor caminó entre las personas,  ensimismado en sus pensamientos.
Miraba la trompeta que traía en sus manos y miraba hacia la base, donde estaba su jefe.

-¿Qué le pasa? Preguntó el pingüino pequeño.
-Está resolviendo un dilema… contestó Marosa. -Debe elegir entre la trompeta y su trabajo.
-Que elija la trompeta, dijo el pingüino más gordo. –Cómo va a elegir el trabajo. Estaría loco si hace eso.
-La decisión no debe ser tan simple, afirmó Marosa.  -Las personas a veces dudan mucho antes de tomar un decisión.
-Pobre, está solo… dijo el pingüino pequeño… y está tan triste…
-Vamos a acompañarlo, dijo el pingüino gordo.
-¡Si! ¡Vamos y lo abrazamos!
Los pingüinos corrieron hacia el actor y casi le pasan por encima a una fotógrafa que hacía su trabajo sin enterarse del drama que ellos percibían.
El actor cuando vio a los pingüinos corriendo hacia él, se desconcentró y miró a al Director, como pidiendo auxilio.
Entonces se oyó: -¡Corten!  -Se estropeó la escena, habrá que filmar todo de nuevo.
Pero no todo se perdió, porque allí entre el público, alguien de la dotación de la base estaba filmando con su cámara de aficionado y registró su propia película, que tituló “Acompañado”...


. . . . . .  . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 

"SOLO" una película uruguaya rodada en la Antártida


último día de rodaje, foto de Gabriela Rufener


SINOPSIS
Nelson es trompetista de la banda de la Fuerza Aérea desde hace más de veinte años. 
Siente que no ha logrado nada en su vida. Luego de que su mujer lo abandona, encuentra en un concurso de música una oportunidad para realizarse. 
La Fuerza Aérea le impone un viaje a la Antártida con la promesa de un posible ascenso, obligándolo a elegir entre el concurso de música y su carrera militar.

FICHA TECNICA

Genero: Comedia Dramática

Duración: 90 minutos

Formato de Captura: Super 16mm.

Dirección: Guillermo Rocamora

Guión: Guillermo Rocamora / Javier Palleiro

Dirección de Fotografía: Bárbara Álvarez
Dirección de Sonido: Fabián Oliver
Dirección de Arte: Mariana Urriza
Edición: Juan Ignacio Fernández
Productor Ejecutivo: Javier Palleiro
Jefa de Producción: Gabriela Boullosa
Asistente de Dirección: Lolo Paradell